
Ya estoy de vuelta para platicarles la cena de Nochebuena y la comida de Navidad, la verdad es que ambas fueron todo un éxito. A. y yo nos divertimos organizando un concurso familiar de amuse bouche (hors d’œuvre de tamaño bocado). Cada quien organizó dos ó tres recetas y pasamos toda la tarde-noche cocinando, y degustando nuestras creaciones, escuchando música, brindando y platicando.
A. preparó los siguientes amuse bouche:
1) Puré de patata y acelgas sobre cecina de León crocante coronada con un huevo de codorniz.
2) Mini hamburguesa (carne de ternera de Guadarrama macerada con pistache y cebolla caramelizada) sobre pan tostado en mantequilla, coronada con un huevo de codorniz y un chorrito de aceite de trufa blanca.
Por mi parte, preparé:
1) Cucharita de salmón marinado con mahonesa de eneldo, cebollino y pimienta rosa.
2) Vol au vent (con masa hojaldrada invertida casera) relleno de caracoles a la bourguignon.
3) Foie-gras frais sobre manzana reineta con reducción de Pedro Ximénez, PX. Aquí A. preparó el foie-gras y yo caramelicé las manzanas y preparé la reducción de PX. El secreto para el foie es macerarlo en azúcar glas freírlo a fuego alto con un chorrito de aceite de oliva y añadirle una pizca de sal al final. De este no tomamos fotos pero repetiremos en Nochevieja.
A. y yo pensamos que los mejores fueron las hamburguesitas y el foie. Estaban verdaderamente exquisitos. Así que declaramos un empate.
La cena de Nochebuena fue bogavante Termidor; y la comida de Navidad fue pularda macerada con aceite de oliva, sal y pimienta, rellena de manzana reineta y canela.

Fue un fin de semana espectacular, aunque los próximos días habrá que comer ensalada y correr por el Retiro.